En 2017, avistamos la presencia de Búho chico en nuestra finca de Sevilla, desde entonces nuestro objetivo, era que anidasen en la finca.
Para ello, decidimos fabricarles unas cestas de mimbre para que se sintieran cómodos y las tomasen como su hogar, pero no hicieron caso. Seguimos buscando los rastros y trazábamos mapas para ver si conseguíamos dar con su nido, pues bien, ¡6 años más tarde lo hemos conseguido!
La sorpresa ha sido enorme, pues han anidado en un naranjo.
Además, y como viene siendo habitual en las puestas de los rapaces que deciden tener crías en nuestra finca, el búho chico ha tenido 5 pollos, la puesta máxima es entre 5-6 lo que es un indicativo de la salud con la que cuenta la finca.